Durante dicha intervención los servicios de comedor y asistencia seguirán funcionando de forma habitual. En este sentido, uno de los objetivos anunciados por la gobernación es que los 52 niños que residen actualmente allí, puedan ser adoptados por familias.
En tanto, la intervención no se debe sólo a una cuestión administrativa; también se tomó en consideración una denuncia por malos tratos contra los menores radicada por uno de los empleados de la Fundación.
Por otra parte, según indicaron, el actual interventor Juan Manuel Casolati, designado por el gobierno bonaerense cuando éste se hizo cargo en forma directa de la Fundación, “acumulaba tres intimaciones desde setiembre del año pasado intimando a regularizar su situación administrativa”.
Fuente: www.lanoticia1.com